Error

Quisiera poder decirle algo a todas las personas que, cuando cometí un error, no me dieron una oportunidad más.
Pero no puedo.
Aún estoy buscando como resolverme.
No sé qué decirme frente al espejo cada vez que me veo ojeroso y con poco espíritu, por dar segundas oportunidades desesperanzadas.
El que perdona fácil siempre termina malherido.
Cada oportunidad que se ofrece lleva implícita una esperanza y de la misma manera se acarrea el riesgo de que ésta se rompa.
Inversión de riesgo, eso es, si ocurre una vez nada te asegura que no ocurrirá una segunda.
Pero suponemos que está bien así como somos los humanos, impredecibles y únicos, atarantados, caminando sobre la floja cuerda del confiar porque amamos y el amar porque confiamos.

No hay comentarios: