Tiempo...

Yo pienso demasiado en el tiempo.

En el tiempo perdido y el tiempo aprovechado, el tiempo que nos pasa por encima sin que a veces nos demos cuenta. Incluso llego a obsesionarme con eso, el miedo que me da la sensación de que los días pasan y pasan y yo sigo en el mismo sitio, impasible, mirando el transcurrir de una hora tras otra y nada más.
Es una sensación que funciona como alarma, como un aviso de que algo no está funcionando bien. O al menos, de que no estoy sabiendo valorar las cosas que estoy viviendo (que es otro de mis "pecados").
Me falta enfoque.
No se trata tampoco de llenar el tiempo de cosas, se trata de vivir incluso esas horas de no hacer nada.

La clave es convertir el tiempo en historia.


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