Visita inesperada

El día de hoy llego como de costumbre al trabajo alrededor de las 6:45am sigo el mismo ritual que todos los días cigarro y una coca fría mientras espero que llegue mi jefe abrir las oficinas:

-ya te voy a dar las llaves cabron de la oficina- escucho a lo lejos.

-ni madres wey- contesto.

-ya vez te pones Reyna con la responsabilidad- 

-nel, por que si me das copia de las llaves vas a querer que diario abra, y cuando al señorito se le ocurra faltar tengo que venir yo así que no se arma compa- 

-ok, ok... Pinche nena

Ingresamos y me voy directo a mi oficina prendo luces, y mi pc.

Se escucha un grito: junta a las 11 Am último en llegar paga los tamales.

Manera clásica del jefe para decirnos que nos va a cagar por los resultados de la semana pasada.

Todos llegamos puntuales, y ya con atole y 2 tamales en mano se empiezan a tomar los puntos del día, las bajás, las altas, las nuevas candidaturas, retención de clientes, pero llego un momento en que me desconecte por espacio de 10 min, solo recuerdo que mira hacia la calle viendo los árboles de afuera, el vaivén del aire, el cantar de los pájaros, no pensaba en nada fueron mis 10 min de nirvana. 

De pronto siento las miradas de mi jefe y mis compañeras.

Y yo de que pedo?

-te fuiste bien cabron wey. 

-para nada solo lo normal.

Termina la junta y me jefe me dice acompáñame.

Dentro de mi dije: ya valió madres ya me van a correr.

Subimos a la azotea de las oficinas y me pide un cigarro, extraño por que nunca lo vi fumar.

Últimamente has estado muy distraído, no duermes, ah pero como fumas cabron, eres un buen elemento si no que el mejor no dejes hundirte tienes un gran futuro, por cierto hoy te quedas a cerrar.

Le dije si era bien no hay pedo.

Todos se fueron a las 5 por lo tanto me quede solo, adelante trabajo de la semana, escuche música, y pendejee por el mundo del internet.

Por ahí de las 21:30 se escucha un gran trueno, y se va la luz un par de segundos siento un escalofrío que recorre mi cuerpo al volver la luz había alguien en mi puerta, camino hacia mi,

Jala una silla y se sienta.

Se puedo fumar aquí? , 

Si no hay problema, busco en mi sacó los cigarros, encendedor y se los acerco, improvisó un cenicero con una hoja y lo pongo en la mesa.

Comienza hablar y mi cuerpo se paraliza inmediatamente...

Pensé que no habría más maneras de sentir pena por ti, pero veo que siempre encuentras nuevas formas de hacerlo, sabes muy bien que se que paso el sábado, ¿de verdad angel no te quieres un poco, no te respetas?, la vida sigue y te lo he dicho de muchas maneras, que ganas con emborracharte diario y seguir fumando como lo haces, acaso quieres dar lástima, que quieres obtener, pensar que algún día volverá y será como antes, pues no cabron entiende se acabo ya no eres nada para ella, bueno si eres un mal recuerdo un mal sabor de boca fuiste una pérdida de tiempo para ella, es eso lo que quieres escucharle decir pues te lo digo yo cabron que te conozco desde hace muchos años, algunas veces voy a verte para ver si aún respiras si aún vives, me da coraje impotencia de como te estas matando lentamente, que es lo pretendes que te de cirrosis, un paro cardíaco, cáncer y no hacer nada de tu vida.

También me entere que ya pasaste el segundo filtro para trabajar en otro estado y sabes que me da gusto cabron que puedas seguir creciendo laboralmente que tengas esas metas esa ambición de comerte el mundo, creo que es cuestión de tiempo para que te vayas.

Más sin embargo si sigues con ese ritmo de vida, el siguiente viaje es para nunca volver y sabes lo primero que haré al verte será escupirte en la cara y volverte a repetir lo pendejo que eres.

Quise articular unas palabras, me se me hizo un nudo en la garganta lo cual me impedía hablar.

Mis ojos lo voltearon a ver, sentí en su mirada el coraje, la impotencia de no saber que más hacer por mi, el miedo de estar tirando mi vida a la basura y todo por que, así es ya saben la pinche respuesta.

Se apagan las luces y siento como me abraza, vuelve la luz y ya no estaba más.